¿Cómo definiría este inicio de curso 2025-2026?
Lo definimos como un inicio de curso con luces y sombras. Se han hecho esfuerzos para mejorar las condiciones laborales del profesorado, pero los problemas de fondo siguen sin resolverse: falta de estabilidad en las plantillas, funciones docentes sin reconocimiento económico y un exceso de carga burocrática que continúa lastrando la labor docente.
¿Cuál es la mayor preocupación de este sindicato ante los problemas en el sector docente?
Nuestra mayor preocupación es clara: que la calidad de la enseñanza no se vea afectada por el deterioro de las condiciones laborales del profesorado. Hablamos de una profesión vocacional, pero si continua el deterioro en las condiciones laborales y la falta de reconocimiento, claro que puede verse reflejado en el trabajo de los compañeros. No olvidemos que el futuro de la educación pasa por cuidar a quienes están en las aulas
Se ha estado denunciando en los últimos tiempos el empeoramiento de las condiciones laborales de los docentes, en cuanto a poder adquisitivo, volumen de trabajo, ratios excesivas, burocracia… ¿Sigue esa tendencia?
Sí, lamentablemente seguimos en la misma línea. Los docentes han perdido más de un 20% de poder adquisitivo en la última década, y los descensos de la natalidad, hacen que el profesorado viva en una casi permanente situación de incertidumbre ante el progresivo cierre de unidades en los centros. A todo esto, se suma una burocracia que cada vez ocupa más espacio en la jornada laboral, restando tiempo a lo verdaderamente importante: la enseñanza.
¿Qué soluciones pueden estar al alcance de la Administración ante estas problemáticas?
Las soluciones son perfectamente posibles si existe voluntad política, por eso ANPE ha firmado un Acuerdo de Mejoras con la Consejería de Educación, que abarca en cada bloque tres cursos escolares. Se han firmado mejoras como son la reducción del horario lectivo, la disminución del número de alumnos por aula, la reducción progresiva de la burocracia, el aumento de los apoyos en infantil, entre otros. También es fundamental e importante, un plan de salud laboral docente que prevenga el desgaste profesional.
¿Cuál ha sido el porcentaje de ocupación de las plazas docentes en la provincia? ¿Qué porcentaje tienen las jornadas asignadas?
En Ciudad Real prácticamente se han cubierto todas las plazas, pero el problema está en la calidad de esa cobertura. Muchas de ellas son interinidades y más de un 15% se han adjudicado con jornadas parciales. Esto supone una precarización del empleo docente que no podemos normalizar y que se podría mitigar si se aprobara la compatibilidad de estos docentes para que puedan recibir un sueldo digno.
¿Hay profesionales de la educación que han dejado o se plantean dejar esta profesión por las condiciones laborales?
Sí, cada vez son más los docentes que nos trasladan su desánimo. La presión, el estrés y la falta de reconocimiento hacen que muchos se planteen abandonar. No es un fenómeno masivo, pero sí preocupante, porque la vocación se mantiene, pero las condiciones desgastan enormemente. Es por ello que seguimos reivindicando figuras en los centros de profesionales de la salud y además, se haga un catálogo de enfermedades profesionales de los docentes.
¿Las agresiones, físicas o verbales, a docentes es un problema creciente y que urge combatir y solucionar o son acontecimientos puntuales?
Podemos decir que es un problema creciente, y nunca debemos mirarlo como hechos aislados. Desde ANPE, a través del servicio del Defensor del Profesor, comprobamos cada curso un aumento en los casos de faltas de respeto, amenazas y agresiones verbales. Aunque los episodios más graves son menos frecuentes, la tendencia nos preocupa y exige medidas inmediatas de protección al profesorado.
¿Sigue la tendencia a la baja del alumnado? ¿En qué grado?
Sí, continúa el descenso, especialmente en Infantil y Primaria, con una bajada que nos preocupa respecto al curso anterior. Para nosotros, esto debería ser una oportunidad para bajar ratios y reforzar la atención personalizada. Sin embargo, lo que vemos es que en muchos casos se está aprovechando esta caída demográfica para suprimir unidades en la escuela pública, y eso es un error que denunciamos.